La cenas de la semana

Much@s nos habéis comentado vuestro interés por la planificación semanal de las cenas. Así que hemos pensado abrir una nueva página en nuestro blog en el que os pondremos una idea por semana para quien le pueda ser útil. La pestaña de acceso la tenéis en la parte superior. Por supuesto, cuanto más comentéis y más propongáis más ideas tendremos todos ante la pregunta...¿y qué cenamos hoy?

Conciliar, ¿es posible?: ¡es necesario!

Por conciliación, comenta Wikipedia, se entiende aquella acción mediante la cual dos posturas encontradas se ponen de acuerdo y llegan a un acuerdo beneficioso para todos.

La vida laboral y la vida personal son dos realidades que se enriquecen mutuamente, en la medida en que mejor cuidemos cada una de ellas, la otra se verá beneficiada. Nuestra vida no está formada de departamentos estancos, cada aspecto es parte de un todo que nos condiciona a ser de una manera u otra (rendimos mejor en el trabajo si tenemos estabilidad en casa y a la inversa)

Conciliar es buscar un equilibrio, compatibilizar nuestra vida personal (familia), nuestro trabajo, nuestra vida social(amigos, aficiones), nuestras inquietudes personales... sin morir en el intento. Se trata de plantearse cómo queremos ser y qué proyecto vital queremos (¿dónde queremos estar dentro de 30 años?).

Y yo, ¿que quiero?:

1. Tener claro un proyecto vital: un hilo conductor que una y sostenga todas esas realidades

2. Establecer prioridades y escala de valores

3. Contar con que es una lucha constante por construir nuestra propia realidad

4.Generar conflictos: buena señal (los conflictos ayudan a plantear decisiones que comprometen personalmente)

y tú, ¿qué quieres?

Deporte para supervivientes

         El otro día vi, y no es la primera vez, a un hombre que participaba en una carrera empujando un carrito de bebé.  Me pareció admirable. Desde luego siempre nos las ingeniamos para hacer aquello que nos gusta o para dedicar tiempo a lo que nos interesa de verdad.


       A mi, la verdad, es que el deporte no me interesa en absoluto, ni verlo ni practicarlo. Además tengo excusas perfectas que acallan mi conciencia para no hacer nada: niños, trabajo... vamos, lo de siempre. Sin embargo he de admitir, muy a mi pesar, que es absolutamente necesario hacer algún tipo de actividad si no queremos "oxidarnos" poco a poco .  Así que me digo a mí misma: "¡basta ya de excusas y muévete!"


      En mi caso, las opciones de salir a primera hora de la mañana o a última cuando los niños están acostados son poco realistas, nunca lo he conseguido. A mediodía no puedo, así que mi única opción es dejar a los niños con alguien o hacer deporte con ellos.


      -Una vez a la semana, me escapo una hora a una clase que tengo fijada y que si quiero anular debo avisar con 24 horas de antelación (así no valen pereza de último momento...).
       -Otra vez a la semana he apuntado a los niños a natación y mientras ellos están con el monitor yo voy a empezar a nadar en una de las calles de la piscina (ya os contaré). Así hacemos deporte todos juntos


         Dejar los niños con alguien una hora a la semana es relativamente fácil si te lo propones. Puede ser desde la chica hasta un abuelo o...pedirle a tu marido o mujer que llegue pronto de trabajar ese día y se encargue de los niños...Y practicar deporte a la vez que los niños puede ser una opción perfecta: apuntálos a tenis y coge otra clase para ti a la vez, salir todos en bicicleta o ellos en bici y tú corriendo, hacer una tabla de ejercicios todos juntos en casa, clases de baile para todos... o jugar a la wii, que me parece un gran invento.

      ¿Te animas a ponerte en forma?

    

Ordem e Progresso

Uno de los más sabios y prácticos consejos que he recibido de uno de mis jefes fue lo que reza la bandera de Brasil: “Orden y Progreso”. Esa es la clave para avanzar, para capear con éxito en cualquier aspecto ya sea personal o profesional.

El día a día nos puede y son mil detalles que tenemos que gestionar. Lo más importante es saber gestionar bien el tiempo, para que cunda el doble. Y si tenemos la cabeza y la agenda bien ordenada, todo va saliendo.

Es importante perder un ratito de cada día, para poner por escrito las cosas pendientes. Una buena agenda ayuda muchísimo. Podemos dedicar unos minutos el domingo por la noche para apuntar todo lo que tenemos pendiente, y poner la hora y el día para hacerlo. Si hacemos la compra un día, prever qué plan tenemos el fin de semana y apuntar lo necesario para comprar para aprovechar, por ejemplo, el momento de la compra semanal y no tener que ir dos veces al super. Y así con todo. Si prevemos los cumples que tienen los niños durante los próximos días, comprar los detalles de varios en el mismo momento, y te ahorras ir tres veces. Si tienes varios pagos pendientes que hacer, ve apuntándolos y cuando vas al banco rematas 5 gestiones en una, por poner un caso. O ir apuntando los restaurantes o sitios de ocio que vamos oyendo para ir haciendo un directorio casero...

Lo mismo, por poner ejemplos, con la ropa. Nos lleva mucho tiempo el cambio de armarios, el probar si les viene esto o aquello, si hacemos esta operación con papel en mano vamos apuntando : comprar “leotardos rojos t.6, calcetines marrones t.8, cinturón, etc.” Y cuando pasemos por una mercería sacas la lista y vas tachando.

Lo mismo en el trabajo. Cuánto tiempo se ahorra “perdiendo” cinco minutos al llegar y al acabar en hacer una lista de prioridades y pendientes. Empezar y acabar un trabajo, con atención y orden, probablemente signifique terminar un trabajo bien hecho, y las posibilidades de tener que repetirlo o meter la pata se minimizan. Así que , la máxima de “distinguir lo importante de lo urgente” es más práctica de lo que parece. Y así, el orden, la serenidad (dentro del caos inevitable), hace que vayamos distinguiendo lo importante y que las cosas vayan saliendo.

¿Con los niños a cuestas?

         El viernes estuve en la guardería en una charla de hora y media en la que la gente ha llevado a sus hijos con edades comprendidas entre los 3 y 24 meses. Aquello era un horror, los primeros 10 minutos bien pero a partir de la media hora....la pedagoga elevaba cada vez más el tono de voz hasta que llegó a la afonía y las madres se quejaban de que sus niños se estaban  "portando fatal". . .

      ¿Se portan mal los niños o están demasiado tiempo en un lugar poco adecuado para ellos? ¿Es bueno que nos acompañen a todo y aprendan a comportarse o es mejor que se queden en casa?

      Por un lado, creo que "someter" a los niños (y a los padres) a compras interminables en el Carrefour es una tortura para toda la familia pero por otro también creo que hacer pequeños recados con los niños es una oportunidad perfecta para estar con ellos y para que aprendan valores y normas de educación. Si tengo que hacer una compra pequeña y a tiro hecho (y no voy con mucha prisa...) me suelo llevar al mediano de 5 años, él viene encantado porque ve una oportunidad de estar a solas con mamá y tener protagonismo y además porque le dejo ir cogiéndo las cosas en el súper e incluso que él proponga algo. Aprende a dar las gracias a la cajera, a que no se compra todo lo que apetece, a ayudar a mamá con las bolsas...y hasta lo pasamos bien. Lavar el coche, por ejemplo, es un plan que les encanta a mis hijos mayores y al pequeño todo lo que sea ir de paseo de un lado a otro le va bien.
      Así que, lo de llevarse de recados o no a los hijos, creo que depende del tipo de recado, de la edad y número de niños, de las prisas que tengamos y de las alternativas que haya al propio recado.
    ¿Y tú, vas siempre con los niños a cuestas?

Ejemplos de menús

Tal y como nos sugerís, proponemos una lista tipo de organización de menús con varios consejos:

1. Encontrar un momento fijo a la semana para elaborarlo
2. Hacer una lista para la compra con el menú en mano
3. Copiar cada 2 semanas platos parecidos
4. Con niños pequeños y poco tiempo, dejemos los platos elaborados para ocasiones especiales. Lo sencillo es amigo de la tranquilidad (un buen filete a la plancha, nada tiene que envidiar a unos escalopines al roquefort....)
5. Coger el menú del cole para no duplicar platos en las cenas
   
   

"Esto de la liberación de la mujer es un timo"

No sé cuántas veces he escuchado esta frase. "Nos han vendido la moto, esto es un tongo..." En fin, que muchas (en este caso no incluyo a los hombres porque hasta la fecha ninguno me ha dicho nada parecido) desearían quedarse en casa y no pueden, o piensan que esto de compatibilizar trabajo y familia les está costando tanto que de "realizarse" (no consigo entender el término) nada de nada.

Os dejo  un enlace muy interesante que salió ayer en Aceprensa sobre el tema

Saludos!

¿Y qué cenamos hoy?

Las prisas diarias y el cansancio puede hacer que no nos tomemos en serio nuestra alimentación ni la de nuestros hijos, pero hay que darle a este aspecto la importancia que se merece, sin agobiarse (a veces parece que si tus hijos no toman actimel todos los días caerán enfermos) pero sin descuidarlo.
La mayoría de nosotros comemos fuera y lo que hacemos en casa son las cenas. Una de las cosas más tediosas de la vida doméstica es enfrentarse a la pregunta... "¿Y qué pongo hoy para cenar?" Abres la nevera, y empiezas a "marear" buscando no sabes muy bien el qué...
Para no dejar el tema a la improvisación y conseguir además que las cenas complementen bien lo que se ha tomado en la comida yo me planifico toda la semana de un golpe los domingos por la noche (en general, los domingos por la tarde-noche están llenos de tareas "pereza", así que una más no importa). Cojo el menú escolar de los niños y planifico las cenas atendiendo a lo que han comido y asegurándome de que siempre haya pescados y verdura. A la vez hago la lista de la compra, para que después no me falte ningún ingrediente!
De esta manera, no me tengo que enfrentar ya en toda la semana a la pregunta y además me aseguro que en general tengamos una alimentación equilibrada.
Y seguro que estaréis pensando que os aburrís siempre de los mismos platos...creo que nos pasa a todos! Os propongo que vayamos poniendo platos típicos de nuestras casas para darnos ideas. De momento yo os cuento que por norma general en invierno alterno sopa con cremas de verduras (calabacín, calabaza, puerro...) de primero y luego un segundo.

¿Alguna propuesta?

"Agente de conciliación"

            No sabía que existe una nueva profesión denominada "agente de conciliación". Como el tema está de moda, ahora se organizan cursos para formar profesionales expertos en conciliación, como éste on line de la ECCA de Andalucía en el que te enseñan "el concepto de la igualdad, la importancia de una adecuada conciliación de la vida familiar y laboral, así como que conocer algunas propuestas y estrategias para su consecución..."


           La realidad es que empezamos nuestra vida familiar/laboral y nadie nos da un curso sobre cómo conciliar. Utilizamos nuestra intuición y nuestro ingenio para intentar hacer compatibles estas facetas tan importantes de nuestra vida.  

        Y yo me pregunto: ¿Por qué no compartir nuestras "estrategias" para conciliar? ¿Por qué no contar todos los malabarismos que hacemos para sobrevivir a nuestro maratón diario? Entre tod@s podemos compartir desde un sencillo truco que nos facilita la vida doméstica (y que aprendimos de nuestras madres)hasta las claves más importantes para tomar decisiones en nuestra vida profesional.
         Agenda, tecnología, recetas, educación, belleza, direcciones de interés...todo tiene cabida en este blog si te atreves a conciliar con nosotras.